ERGY D aporta colecalciferol o vitamina D3 de origen natural. La proteína de transporte de la vitamina D o DBP tiene más afinidad con esta forma de origen animal, que proviene de la lanolina o cera de lana, que con el ergocalciferol, forma vegetal o vitamina D2. Asi la vitamina D3 permite mantener más tiempo la concentración circulante de dicha vitamina (1). Liposoluble, su soporte es el aceite virgen de colza, de primera presión en frío, enriquecido en vitamina E de origen natural para preservarla.
¿ En qué casos utilizarla ?
Por temporada (desde octubre hasta marzo):
– Para reforzar el sistema inmunitario (gripe, infecciones respiratorias, asma…).
– Para la salud musculoesquelético (niños, adultos, deportistas).
Durante largos periodos:
– En las personas que se exponen poco o casi nunca al sol, con pigmentación oscura de la piel, mujeres embarazadas…
– En las personas mayores (prevención de caidas, fracturas, osteoporosis),y en convalecientes.
Consejos de uso
1 gota al día aporta 5 μg* (200 UI) de vitamina D3. 10 gotas pueden ser necesarias para reequilibrar el terreno según las recomendaciones del Profesional de la Salud.
*100 % de los VNR o Valores Nutricionales de Referencia.
Ingredientes
Aceite virgen de colza, de primera presión en frío, vitamina D3 (colecalciferol), antioxidante: vitamina E de origen natural.
« Nuevos » efectos de la vitamina D
Efectos sobre la inmunidad
La vitamina D es un inmunoregulador. Modula la inmunidad «exacerbada» en numerosas enfermedades auto-inmunes (esclerosis en placa, diabetes de tipo 1…) (7). Estimula las defensas inmunitarias frente a diferentes infecciones (tuberculosis, gripe…) (8-9). En presencia de un agente infeccioso, induce la «producción» de un péptido antimicrobiano, la catelicidina, que contribuye a destruirlo. Algunos estudios muestran su efecto positivo sobre el asma.
Vitamina D y riesgo cardiovascular
Un estudio prospectivo revela que una concentración en calcitriol inferior a 15 ng / ml suele estar asociada a un aumento significativo de la prevalencia de diabetes de tipo 2, hipertensión, hiperlipidemia, crisis cardiaca, AVC(10). La vitamina D tiene una acción directa sobre las células endoteliales vasculares y los cardiomiocitos; controla la secreción y la sensibilidad a la insulina, disminuye la inflamación, reduce la hormona paratiroidea PTH y controla el gen de la renina.
Vitamina D y cáncer
Numerosos estudios establecen una correlación entre una carencia en vitamina D y el riesgo de cáncer, entre otros, colorectal, de mama y de próstata. La vitamina D3 activa « producida » localmente en esos tejidos regularía una gran variedad de genes implicados en la proliferación y la diferenciación celular. Favorece también la apoptosis, suprime la angiogénesis… regula las señales para los receptores de estrógenos y andrógenos, y reduce la expresión de la aromatasa(11).
Otros efectos
Hay una relación directa entre baja tasa sanguinea de vitamina D y declive cognitivo, depresión. Tiene un papel fundamental en la proliferación y la transmisión neuronal, en la neuroprotección. En el deportista, su concentración tiene una influencia sobre el rendimiento físico, la predisposición a las fracturas, la inmunidad y la salud ósea. En el inicio del embarazo su carencia ha sido asociada a un riesgo aumentado de preeclampsia y de diabetes gestacional.